Examinados desde la división Concept Shop de Zildjian, y disponible en todo el mundo, os presentamos los revolucionarios FX Raw Crashes; sin duda los platos más refinados y funky´s que jamás hayamos fabricado en Zildjian. Y es que, aparte de que no hay dos Raw Crashes que suenen igual, son los mejores platos que puedas imaginar para personalizar tu set como nunca antes hubieras imaginado y con un sonido 100% único.
Los platos Raw Crashes no están ni martillados, ni torneados, lo que le confiere a cada uno un perfil muy irregular y una superficie sin refinar; incluso “deforme”. Tampoco están cortados de manera circular perfecta y de ahí sus formas y medidas extrañas con un borde rudo y áspero.
En definitiva, estas variaciones de perfil, forma, tamaño y consistencia son las que crean esos sonidos individuales que hacen de estos platos algo muy especiales.
- Secos y cortantes
- Ideal para acentuar sin rebasar el patrón marcado por tu baqueta.
- Ideal su uso como Ride alternativo
- Dos tipos de campana: Small Bell Raw Crash que ofrece un sonido controlado con
- menos sobre tonos y el Large Bell Raw Crash más abierto, con un pronunciado
- sonido de campana e ideal para escenarios en los que se necesita una proyección moderada
Desde el punto de vista estético, cada Raw Crash presenta vetas, manchas y remolinos de distintos colores. Todas estas señales se crean cuando el metal caliente se templa y, con el tiempo, seguirán desarrollándose. Algunos Raw Crash pueden presentar estrías por el laminado, marcas de herramientas y/o arañazos por el movimiento de las piezas en bruto calientes, marcas de tiza que indican la ubicación del vaso y el número de horno, y otros signos reveladores de su paso por la fundición.
Se tratan de características puramente visuales que se producen de forma natural en el proceso y que no afectan al sonido o a la longevidad.